Reproducción de la lectura del Corán (en cinta), mientras no se escucha.

Reproducción de la lectura del Corán (en cinta), mientras no se escucha.




Autor: Imaam Muhammad Nasir-ud-Din Al-Albani
Fuente: "Kayfa yajibu alaynaa 'an Nufassir al-Corán" (págs. 17-19)
Producido por: Al-Ibaanah.com


Desde el próximo E-Book "¿Cómo estamos obligados a interpretar el Corán?" del Imaam Al-Albani, rahimahullaah, es una traducción del folleto "Kayfa yajibu 'alaynaa un Nufassir al-Corán."
[4] Pregunta: En el caso donde se graba y se reproduce el noble Corán, pero algunas de las personas de alrededor no lo escuchan porque están ocupados hablando entre sí, ¿Cuál es la decisión que afectar'a a aquellos no escuchen el Corán? ¿Son estas personas pecadoras o simplemente una persona que escucha el Corán en la grabadora?


[4] Respuesta: La respuesta a esta cuestión varía en función de los diferentes escenarios en los que el Corán está siendo recitado en la grabadora. Así que si el escenario es una reunión de conocimiento, el recuerdo y la recitación del Corán, a continuación, en esta situación, se obliga a prestar atención completa a la misma. Y quien no lo hace, está pecando porque está desobedeciendo la declaración de Allah en el Corán: "Y cuando el Corán sea leído, escuchadlo con atención y guardad silencio para que se os tenga misericordia.." [Sura Al-A'raaf: 204]


Y si no es una reunión de conocimiento, recuerdo y la recitación del Corán, sino más bien, una reunión normal, como cuando una persona trabaja en casa o los estudios o investigaciones, a continuación, en esta situación no está permitido que esta persona encienda la grabadora y eleve el volumen de la recitación de tal manera que el sonido llegue a los oídos de las otras personas dentro de la casa o reunión.

Esto es desde que, en este escenario, estas personas no son responsables de escuchar el Corán, ya que no se reúnen para esa ocasión. El que tendrá que rendir cuentas es la persona que sube el volumen de la grabadora y hace que todos los demás lo escuchen. Esto es porque carga a la gente y les obliga a escuchar el Corán en una situación en la que no están dispuestos a hacer este tipo de escucha.

El ejemplo más cercano que podemos dar de esto es cuando uno de nosotros camina por una calle y escucha los sonidos del comerciante de mantequilla y los vendedores de falafel, así como el que vende estas cintas de cassette grabadas. Así que el sonido del Corán llena la calle, y donde quiera que vaya, se oye su sonido. Así están las personas que andan en la calle - todo el mundo en su camino por separado - responsable y obligado a permanecer en silencio durante la recitación del Corán pero... ¿en lugares que son apropiados?! No, más bien aquel que tendrá que rendir cuentas es sólo la persona que carga la gente haciendo que escuchen el sonido de la lectura del Corán, porque si lo hace con fines comerciales o porque quiere llamar la atención de la gente o para cualquier otro beneficio material que quiere conseguir.

Así que por lo tanto, están tratando a la lectura del Corán, desde una perspectiva, de instrumento musical, como sucede en algunos ahadiz. [1] Así que están comprando una pequeña ganancia con versos de Allah a través de este método, como el método utilizado por los Judíos y los cristianos, de quien Allah dijo: "Éstos cambian los signos de Allah por un vil precio." [Sura Al-Tawbah: 9]

Notas al pie:
[1] Silsilat-ul-Ahaadiz as-Sahihah: 979
Traducido del Inglés al Castellano por: Hayat al’andalusia.
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